Por el crecimiento del río Uruguay, las autoridades se vieron obligadas a decretar el estado de alerta naranja en todas las poblaciones cercanas. Como consecuencia de las constantes lluvias, más de 2.500 personas al norte del país debieron ser auxiliadas. El fenómeno también alcanzó a Argentina que ya presenta serias inundaciones en las provincias de Corrientes y Entre Ríos.
La intensidad de las precipitaciones generó una crecida en el río Uruguay que sobrepasó su nivel normal y llegó a los 14 metros. De continuar las condiciones meteorológicas se estima que la situación podría llegar a afectar también a Brasil. El último comunicado oficial del Sistema Nacional de Emergencias (SINAE) de Uruguay informó que la cantidad de personas damnificadas aumentó a 3.475, las cuales “están recibiendo atención integral: resguardo, protección, alimentación, abrigo, recreación y salud”.
“El departamento más afectado sigue siendo Salto donde permanecen 1.993 personas fuera de sus viviendas”
Las provincias de Uruguay en las que se presentaron mayores inundaciones aparte de Salto son Paysandú, Artigas y Río Negro. Durante varias horas tanto el servicio de agua potable como el de energía eléctrica presentaron fallas que dejaron a los habitantes en total aislamiento.
Si bien las autoridades han indicado que los evacuados están siendo atendidos oportunamente por el Estado, en diálogo con El País Norma Beatríz, una de las damnificadas expresó: “Es insoportable el frío, los abrigos que nos han entregado son escasos y ha venido el intendente y lo único que quería era sacarse una foto comiendo con nosotros y que no pidiéramos nada”. La mujer, que permanece en uno de los refugios improvisados por el Gobierno en compañía de sus ocho hijos y dos nietos, indicó que el Estado no cumplió con la promesa de brindarles una vivienda digna.
“Los únicos que nos tratan bien y con respeto son los militares con la entrega de la comida y la leche pero más no pueden hacer”
En el caso de Argentina las ciudades de Concordia, Paraná, Concepción del Uruguay, Gualeguaychú y Colón, ubicadas en Entre Ríos, fueron las que recibieron con mayor impacto los estragos causados por el fenómeno. De acuerdo al diario Uno Entre Ríos, la zona más afectada es Concordia, con 237 habitantes damnificados, de los cuales 72 dejaron sus viviendas y buscaron refugio en casas de familiares o amigos y 165 están en los refugios instalados por la Defensa Civil.
Por la misma situación transita Corrientes, con 500 evacuados en la ciudad de Santo Tomé. Por causa de las inundaciones, la provincia ha sufrido millonarias pérdidas tras la muerte de más de 50 mil cabezas de ganado.
En publicación del diario La Verdad de Junín el intendente de Santo Tomé, Víctor Giraud, manifestó que habrán más lluvias en la zona, debido a que Brasil experimenta constantes precipitaciones que repercuten en el crecimiento de la represa de Foz de Chapecó. Una situación que, según Giraud, repercute directamente en la ciudad argentina.
“Estamos disponiendo los alimentos para cuatro comidas diarias con colaboración del Ejército, que cocina para la gente”
Con la colaboración de los ministerios de Salud y Desarrollo Social, los miembros de Defensa Civil, la Gendarmería y el cuerpo de Bomberos voluntarios adelantan diversas tareas para auxiliar a las víctimas. Los afectados han recibido desde alimentación, frazadas, colchones, entre otros insumos, hasta atención médica.
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